Hace pocos días que ha comenzado una nueva temporada de esquí con muy buenas condiciones de la nieve gracias, en gran parte, a las nevadas provocadas por la borrasca DANA durante las últimas semanas que han permitido a las estaciones de esquí del pirineo comenzar la temporada días antes de lo previsto. Después de una temporada marcada por el impacto del Covid-19, las restricciones y las pérdidas económicas, las estaciones de esquí encaran esta nueva temporada con unas grandes perspectivas.

Las estaciones de esquí de España han realizado una inversión de 38,2 millones de euros para esta nueva temporada, casi un 2% más que la temporada pasada en la que tuvieron grandes caídas en los beneficios respecto temporadas anteriores, aproximadamente un 70% menos de facturación. Estas cifras se deben en gran parte a las restricciones de movilidad existentes (no se podía ir a esquiar a Andorra por ejemplo) que provocaron un 68% menos de ingresos en los forfaits vendidos en las estaciones.

El Pirineo aragonés, liderado por el grupo de estaciones bajo el paraguas de Aramón, es el que más inversión ha realizado para esta nueva temporada, en concreto, han sido 10 millones de euros, principalmente destinados a nuevas infraestructuras de gran coste como son nuevos tres nuevos telesillas y también inversiones en sostenibilidad y en mejorar la experiencia del cliente con innovaciones tecnológicas. Sierra Nevada se sitúa en segunda posición con nueve millones de inversión, destinados sobretodo a mejorar su red de innivación con la instalación de 77 nuevos cañones de nieve artificial.

Esquí i Paisatge

Entre las estaciones del Pirineo catalán, destaca Baqueira – Beret, la estación de esquí de la Vall d´Aran ha invertido ocho millones de euros en mejorar y ampliar sus pistas de esquí, además de un nuevo telesilla desembragable y también inversiones en digitalización de la estación y la venta de forfaits, una digitalización que ha llegado para quedarse y en la que la mayoría de estaciones ha apostado decididamente en la venta online y también con una política de precios variable según la demanda que, ayudan a reducir las colas en las taquillas y a adelantar los ingresos para las estaciones.

Las seis estaciones de esquí y montaña catalanas gestionadas por “Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC)” apuestan también por la transformación digital con el objetivo de mejorar la experiencia, la comodidad y ofrecer un mejor servicio a sus esquiadores. Además, también se han invertido en mejorar la red de cañones artificiales de las estaciones, cada vez más necesarios debido al cambio climático y en infraestructuras en mejoras en accesos y pistas en algunas de ellas.

Las buenas condiciones meteorológicas de inicio de temporada hacen presagiar que será una temporada muy positiva y, muy necesaria, para todo el sector de la nieve en España, no sólo estaciones, sino también para el personal que trabaja en ellas, la hostelería y restauración de los pequeños pueblos cercanos y otros servicios relacionados como el alquiler de material, viajes y servicios relacionados con el sector de la nieve. Será, a final de temporada, cuando analizaremos si realmente se han cumplido las perspectivas iniciales o por el contrario ha vuelto a ser una mala temporada, esperemos que sea lo más positiva posible. Lo veremos en unos meses.